"El padre Jofré defendiendo a un loco" - Joaquín Sorolla (1883) |
Este es un breve texto de Honorio Delgado, en presentación de una conferencia dedicada a "La personalidad y el carácter en la obra de Cervantes", por Carlos Gutiérrez-Noriega, y ofrecida en el seno de la Sociedad de Neuro-psiquiatría y Medicina Legal en Lima, 1947, con motivo del IV centenario del nacimiento de Don Miguel de Cervantes Saavedra.
Sorprende -qué lamentable tener que usar este verbo en desmedro del hoy- la vigorosa actividad y riqueza de actividades de nuestra psiquiatría en aquella época, cuando sendas sesiones se dedicaban a temas humanísticos y culturales y tan diversos dones e intereses se conjuntaban para mayor enriquecimiento de los cultores de la medicina psicológica, así, Carlos Gutiérrez Noriega, quien lamentablemente falleció muy joven, fue un muy destacado psicofarmacólogo a la vez que un dotado y versátil estudioso de la antropología, la psicología y la historia. Sus aportes en el campo de la exégesis cervantina son ahora difícilmente accesibles pues la Revista de Neuropsiquiatría de Lima no cuenta con su colección subida al ciberespacio sino arrumada en alguna oscura hemeroteca. Sobre Gutiérrez Noriega sólo se encuentran en internet dos breves reseñas biográficas que aportan cumplida idea de su efervescente actividad en más de un campo de la actividad científica y cultural. Para la próxima subiremos a la red alguno de sus valiosos, pero ignorados hoy, estudios cervantinos.
Cuánta razón tiene Fernando Colina en el prólogo a La invención de las enfermedades mentales de José María Álvarez, cuando afirma que "si la psiquiatría es hija de la cultura a la que pertenece, podemos sostener con la misma firmeza que la psiquiatría presente es radicalmente inculta, si nos referimos ahora a la relación con el conjunto de conocimientos de su tiempo."
Si Don Honorio nos viese...
Sorprende -qué lamentable tener que usar este verbo en desmedro del hoy- la vigorosa actividad y riqueza de actividades de nuestra psiquiatría en aquella época, cuando sendas sesiones se dedicaban a temas humanísticos y culturales y tan diversos dones e intereses se conjuntaban para mayor enriquecimiento de los cultores de la medicina psicológica, así, Carlos Gutiérrez Noriega, quien lamentablemente falleció muy joven, fue un muy destacado psicofarmacólogo a la vez que un dotado y versátil estudioso de la antropología, la psicología y la historia. Sus aportes en el campo de la exégesis cervantina son ahora difícilmente accesibles pues la Revista de Neuropsiquiatría de Lima no cuenta con su colección subida al ciberespacio sino arrumada en alguna oscura hemeroteca. Sobre Gutiérrez Noriega sólo se encuentran en internet dos breves reseñas biográficas que aportan cumplida idea de su efervescente actividad en más de un campo de la actividad científica y cultural. Para la próxima subiremos a la red alguno de sus valiosos, pero ignorados hoy, estudios cervantinos.
Cuánta razón tiene Fernando Colina en el prólogo a La invención de las enfermedades mentales de José María Álvarez, cuando afirma que "si la psiquiatría es hija de la cultura a la que pertenece, podemos sostener con la misma firmeza que la psiquiatría presente es radicalmente inculta, si nos referimos ahora a la relación con el conjunto de conocimientos de su tiempo."
Si Don Honorio nos viese...
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