Hace tiempo no leíamos un libro psiquiátrico sobre depresión en que se mencionase, y no como de pasada o gratuitamente, a Nietzsche o Aristóteles. Hace tiempo... y nos hacía recordar a la distancia a aquel primer libro que conseguimos nomás llegando la residencia psiquiátrica y que no fue adquirido en una biblioteca precisamente sino ¡en un supermercado!: "Más Platón y menos Prozac" de Lou Marinoff.
Aún no pasamos de las primeras páginas de "On Depressión" , del proficuo psiquiatra S. Nassir Ghaemi, pero nos ha entusiasmado leer aquello que no se encuentra en los textos al uso hoy en día, una visión íntegra de la persona que se deprime, sin extremismos psicológicos ni neurobiológicos. Así, párrafos como éste (la traducción es mía): "En la medida en que experimentamos dolor podemos vivir; sin dolor, moriríamos. Es el caso del dolor físico respecto al cuerpo, y del dolor mental respecto a nuestra mente y cerebro. Parece haber un rol trascendental, en la existencia humana, para la depresión. Cuando nos deprimimos, eso significa que nos hallamos en un punto muerto; talvez es que nuestros juicios estaban equivocados respecto a algo o alguien, y debiéramos redirigir nuestro rumbo. La depresión, como el dolor, posee un significado. Nuestro trabajo no consiste simplemente en erradicarla sino en buscarle su sentido."
Enfoques así con soslayados por la psiquiatría del main stream y se confinan a manuales de psicoterapia, cual si fueran de índole alternativa, secretista. Inclusive Ghaemi se refiere a la depresión-no-enfermedad y a la depresión-enfermedad, para discernir aquellos cuadros de naturaleza reactiva, por desajuste psíquico de la persona con su entorno, en los que la estimativa de valores individuales requiere ser reajustada, y donde la medicación antidepresiva no es el recurso primordial sino que puede resultar muchas veces engañoso placebo. Y Ghaemi critica la hipertrofia del diagnóstico de depresión mayor, tan abarcativo y poco discriminador, y así lo dice taxativamente: "la mayoría de casos de depresión no son patológicos, no son depresiones en el sentido de constituir enfermedades".
Y cosa inusual en un libro psiquiátrico -cómo estará la psiquiatría actualmente que nos sorprende gratamente hallar uno como éste donde se cita con solvencia a filósofos, literatos y se habla de historia y de antropología- Ghaemi critica el modo en que vivimos y comenta algo muy necesario y que no es un sentimiento ni un pensamiento sino una virtud imprescindible : el coraje.
Ghaemi ha titulado su obra sencillamente pero con resonancias latinas: "On depression", y sin duda su libro tiene el decantado e inconfundible sabor de un clásico.
Enfoques así con soslayados por la psiquiatría del main stream y se confinan a manuales de psicoterapia, cual si fueran de índole alternativa, secretista. Inclusive Ghaemi se refiere a la depresión-no-enfermedad y a la depresión-enfermedad, para discernir aquellos cuadros de naturaleza reactiva, por desajuste psíquico de la persona con su entorno, en los que la estimativa de valores individuales requiere ser reajustada, y donde la medicación antidepresiva no es el recurso primordial sino que puede resultar muchas veces engañoso placebo. Y Ghaemi critica la hipertrofia del diagnóstico de depresión mayor, tan abarcativo y poco discriminador, y así lo dice taxativamente: "la mayoría de casos de depresión no son patológicos, no son depresiones en el sentido de constituir enfermedades".
Y cosa inusual en un libro psiquiátrico -cómo estará la psiquiatría actualmente que nos sorprende gratamente hallar uno como éste donde se cita con solvencia a filósofos, literatos y se habla de historia y de antropología- Ghaemi critica el modo en que vivimos y comenta algo muy necesario y que no es un sentimiento ni un pensamiento sino una virtud imprescindible : el coraje.
Ghaemi ha titulado su obra sencillamente pero con resonancias latinas: "On depression", y sin duda su libro tiene el decantado e inconfundible sabor de un clásico.
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ENLACES:
- Diagnosing Our Despair: Depression in Modern Man, por Nassir Ghaemi, en The Good Men Project.
- On depression, de S. Nassir Ghaemi, en Amazon.com
- On depression, de S. Nassir Ghaemi, en Amazon.com
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Hola, interesante entrada. Lo que no me queda claro es por qué es necesario experimentar dolor para poder vivir.
ResponderEliminarMe gusta mucho tu blog, gracias por ofrecer parte de tu tiempo con estas maravillosas entradas que me hacen reflexionar.
Saludos!!
Hola:
ResponderEliminarGhaemi usa un ejemplo sencillo y paradigmático acerca de la necesidad del dolor físico, refiriéndose a la condición llamada "insensibilidad congénita al dolor":
http://en.wikipedia.org/wiki/Congenital_insensitivity_to_pain
Las personas que padecen esta condición, no pueden detectar oportunamente sus propias lesiones o heridas mediante el aviso del dolor y por ende sufren mayores complicaciones en su salud.
Gracias por tu amable comentario.