Que la razón no me acompañe más, dice mi compañero, y lo acompaño porque amo, como nadie, el extravío. Vuelve mi compañero a la razón y acompaño otra vez al compañero porque sin la razón no sobrevivo.
Las fluctuaciones de la razón a la sin razón pueden ser una excelente musa para la gaya de las artes
Así es, amigo Tony, te agradezco hayas hecho una pausa en tus merecidas vacaciones para visitarme. Pendientes muchos brindis para el gay trinar. Un abrazo.
Las fluctuaciones de la razón a la sin razón pueden ser una excelente musa para la gaya de las artes
ResponderEliminarAsí es, amigo Tony, te agradezco hayas hecho una pausa en tus merecidas vacaciones para visitarme. Pendientes muchos brindis para el gay trinar. Un abrazo.
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